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9 de cada 10 personas en el mundo siguen teniendo prejuicios de género

El nuevo índice de Normas Sociales de Género (GSNI por sus siglas en inglés), publicado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), revela que en la última década no ha habido avances en la erradicación de los prejuicios contra las mujeres. De acuerdo con el documento, aproximadamente 9 de cada 10 personas en todo el mundo mantiene actualmente un sesgo contra la población femenina.

El nuevo índice de Normas Sociales de Género revela una serie de cifras que frenan el alcance de la igualdad: Por una parte, la mitad de la población mundial cree que los hombres son mejores líderes políticos que las mujeres, y más del 40% considera que los hombres son mejores ejecutivos empresariales. Asimismo, el informe sostiene que el 25% de la población mundial cree que está justificado que un hombre le pegue a su esposa.

Naciones Unidas señala que la prevalencia de estos prejuicios contra las mujeres responde a una reacción organizada contra la igualdad de género que toma fuerza a nivel mundial. “En muchas partes del mundo, los movimientos contra la igualdad de género han ganado tracción, y los derechos de las mujeres han retrocedido”, advierte PNUD en el informe.

El documento detalla que las mujeres siguen enfrentando una serie de barreras de género en diferentes ámbitos de su vida. Por un lado, los datos arrojan que las mujeres están subrepresentadas tanto en política como en administración pública y liderazgo empresarial. Por ejemplo, sólo un 11% de los jefes de estado y el 9% de los jefes de gobierno son mujeres, y sólo un 22% de ellas ocupan cargos ministeriales.

Desde el informe indican que promover políticas en favor de la corresponsabilidad y que valoren el trabajo de cuidado no remunerado es crucial para potenciar tanto el trabajo y liderazgo femenino, como también para generar cambios en la forma de percibir la contratación de mujeres.

“Un punto de partida importante es reconocer el valor económico del trabajo de cuidados no remunerado. Esto puede ser una forma muy eficaz de combatir las normas sociales de género respecto a este tipo de ocupación. En aquellos países donde las normas sociales revelan mayores sesgos de género, se calcula que las mujeres dedican al trabajo de cuidados no remunerado entre seis y siete veces más tiempo que los hombres”, explica Raquel Lagunas, Directora del Equipo de Género del PNUD.

Si bien queda mucho camino por recorrer para alcanzar la equidad de género a nivel mundial, el informe sostiene que las políticas gestadas para lograr una participación igualitaria en educación han sido efectivas, pues cada vez hay más mujeres matriculadas en los distintos niveles educativos. Sin embargo, las cifras demuestran que esta reciente mejora en materia educacional no se traduce en mejores resultados económicos para las mujeres: En 59 países donde las mujeres cuentan con un mayor nivel educativo que los hombres, la brecha de género en los ingresos sigue siendo de un 39% en favor de ellos.

Desde Naciones Unidas enfatizan en que la eliminación de las brechas de género y de los prejuicios contra las mujeres requieren de la incorporación de medidas legislativas y de políticas a nivel mundial que reconozcan, por una parte, los derechos de las mujeres en todos los ámbitos de la vida, y que permitan frenar los estereotipos y violencias de género, así como promover la representación femenina en los procesos políticos y tomas de decisiones, entre otros.

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