La tasa de emprendimiento en Chile se disparó con la pandemia y aunque los economistas aseguran que es preocupante que las mujeres sólo están involucradas en un 38 por ciento de los nuevos emprendimientos, las tasas demuestran un aumento sostenido en los últimos años.
En marco del día mundial del emprendimiento femenino se establece que la fuerza emprendedora femenina aún no alcanza el 40 por ciento según Global Entrepreneurship Monitor (GEM), es innegable que en los últimos años cada vez son más las mujeres que se atreven a iniciar sus propios proyectos. Según los registros del Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INAPI), en 2020 se registró un aumento del 109% en comparación con 2019 en lo que a mujeres titulares de marcas respecta. Además, las solicitudes que incluyeron -al menos- una mujer titular en proyectos empresariales aumentaron un 101% en comparación con el mismo período.
Y es que más allá de la crisis sanitaria, se crearon más oportunidades de negocios y la participación femenina se vio potenciada en todos los ámbitos. Algo que quedó de manifiesto en los resultados de la encuesta EME 6, realizada por el Ministerio de Economía, que establece que existen tres factores que influyen en esta decisión de emprender. El primero es la oportunidad que se presenta y les da la opción de generar más ingresos; segundo, es la necesidad de quienes no encuentran trabajo o lo han perdido, y, por último, la flexibilidad que ofrece, especialmente para quienes no cuentan con una red de apoyo para el cuidado familiar. Pero, más allá de las motivaciones y realidades particulares, en su conjunto el emprendimiento se convirtió en un motor clave de la economía mundial que hoy está cumpliendo un rol clave en la reactivación.
Cuando la ONU pronostica que el futuro de la economía mundial sería liderado por mujeres, destacó la importancia de avanzar en la entrega de herramientas necesarias a las mujeres de todas las edades en todos los rincones del mundo.
En Estados Unidos, cerca de un 36% de las empresas del país son de propiedad femenina. Según los números del país del norte, entre 2015 y 2016, la actividad empresarial femenina aumentó el doble en comparación a la tasa masculina. Algo que muchos esperan se replique en nuestro país. Hoy por cada 10 emprendedores, existen 7 mujeres que deciden arriesgarse. Para mejorar las cifras, los expertos hablan de la necesidad de aumentar la capacitación y el financiamiento, dos de los principales obstáculos que enfrentan hoy las mujeres al momento de emprender.
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