Un estudio realizado por Criteria, RedMad y Coca-Cola Chile identificó que a igual nivel de estrés laboral, dado que las mujeres tienen más carga de trabajo doméstico que los hombres, viven un nivel de satisfacción menor que ellos en cuanto al cumplimiento de metas asociadas al desarrollo personal.
Los resultados generales del estudio demuestran que las personas que se encuentran estresadas laboralmente tienen un porcentaje significativamente mayor de frustración con el cumplimiento de las actividades propuestas de desarrollo personal, especialmente en las mujeres con un 38% versus el 30% en el caso de los hombres.
Este estudio realizado por Criteria junto a la Red de Mujeres en Alta Dirección (REDMAD) y Coca-Cola Chile, y elaborado a partir de la respuesta de alrededor de mil personas mayores de 18 años, llegó a la conclusión de que la carga de trabajos domésticos y de cuidados son factores que inciden en la posibilidad de cumplir metas que demandan tiempo y dedicación, como desarrollar un pasatiempo, capacitarse o cultivar relaciones con amigos.
Por ejemplo, al momento de desglosar las propuestas de desarrollo personal para este año, un 80% de los encuestados asegura que buscó tener hábitos más saludables (hacer deporte, mejorar la alimentación, dejar de fumar, entre otros). Sin embargo, un 27% se declara frustrado con este propósito, siendo más alto en el caso de las mujeres, con un 32%.
Las cifras anteriores pueden explicarse por el hecho de que, en el caso de las personas estresadas laboralmente, las mujeres tienen además una carga de trabajo doméstico mayor que los hombres: El 42% de ellas realizan al menos cuatro actividades por tres horas o más a la semana, mientras que en el caso de los hombres esta cifra llega a un 24%.
“Vemos que, en el desarrollo de carrera de las mujeres, la conciliación trabajo y vida personal es uno de los mayores desafíos y a la vez una barrera nítida para su avance a la alta dirección. Este tipo de estudios nos permiten comprender mejor los desafíos y la importancia de considerar las variables que aportan bienestar a las personas, que van más allá de las tareas domésticas o del trabajo”, señala Maribel Vidal, vicepresidenta de REDMAD.
Respecto al cultivo de relaciones personales (familiares, hijos, amigos, pareja), un 79% de los encuestados se mostró proclive a este propósito, con un 9% de frustración general, siendo también más alto en las mujeres con un 10%. Asimismo, un 70% se puso como objetivo capacitarse (tomar cursos, ampliar conocimientos), pero un 20% advierte que no lo cumplió, también siendo más alto en las mujeres con un 22%.
Para Camila Sepúlveda, Directora de proyectos de Criteria, “el hecho de que las mujeres muestran un mayor nivel de insatisfacción con la realización de actividades de desarrollo personal parece no explicarse por la carga laboral, sino que por la carga de trabajo en el ámbito doméstico y familiar (cocinar, limpiar, lavar la ropa, planchar, alimentar a los niños, ayudarlos con las tareas e ir a actividades de apoderados). Los costos de una distribución desigual de las actividades del hogar lo pagan finalmente las posibilidades de las mujeres de hacer más deporte, juntarse más con amigos, leer más, tomar más cursos, etc.”, explica la experta y asimismo concluye el estudio.
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