La campeona de motocross y enduro, Tania González, integrante de la plataforma deportiva Women4sports, lleva arriba de la moto casi veinte años. Este 2023, con sucesivos títulos como campeona nacional y posicionada en el ranking top 10 luego de haber corrido en España, la deportista chilena se prepara para el Mundial de Enduro Six Days que se celebra próximamente en Argentina.
Nacida en Licantén, una comuna de la Provincia de Curicó, Tania González (26) creció mirando deportes extremos. Su papá, seguidor de la disciplina, le regaló una moto a ella y su hermano cuando ambos eran pequeños, sin embargo, desde el comienzo fue siempre Tania la más interesada en subirse. A los 8 años ya estaba realizando su primera carrera, donde fue la única mujer del campeonato. Eso se mantuvo así por harto tiempo, compitiendo en motocross sólo con hombres, hasta que, finalmente, se abrió la categoría femenina.
El hecho de que actualmente Tania pueda competir con una categoría propia refleja los cambios positivos que ha tenido la disciplina. “Creo que las mujeres hemos ido abriendo un gran camino en el motociclismo, y se nos está apoyando más. De todos modos, todavía quedan machismos en ciertas cosas, algunos comentarios y cosas así. Todavía pasa que, por ejemplo, cuando una mujer gana, yo siento que aún les duele, los hombres se molestan entre ellos, pero sí hay más respeto”, sostiene Tania.
La deportista, quien pasó a competir a la categoría Femenina el año 2010, registra diversos títulos nacionales hasta la fecha: Campeona nacional de Enduro Fin los años 2013, 2017, 2018 y 2021; Enduro Cross Country en 2016, 2017 y 2018; campeona de Motocross en 2011, 2014 y 2021; y campeona de velocidad en 2015. Sumado a ello, en 2022 participó en su segundo mundial de Enduro disputado en España, donde logró posicionarse en dos top 10, resultando la deportista latinoamericana más destacada. Ahora, mientras participa en las actuales competencias nacionales de Enduro y Motocross en Chile, la joven se prepara para su siguiente paso, el Mundial Enduro Six Days que se realiza en noviembre en la localidad de San Juan (Argentina).
Para la deportista, participar de esta disciplina le ha implicado un gran esfuerzo económico tanto a ella como a su familia, y señala al respecto una anécdota personal que nunca ha olvidado: “Para mi primera competencia recuerdo que tenía que correr con un traje de mi hermano. Era un pantalón que me quedaba gigante, un polerón y unas botas de nieve, porque no teníamos para comprar los zapatos. Cuando llegué a esta carrera, competía con niños, todos con sus trajes bien equipados. Yo estaba en la alargada y veía que algunos niños se reían, al principio no entendía por qué, y claro, se reían porque yo andaba con las botas de nieve. De todas maneras, mis papás siempre me protegieron de eso, yo tampoco nunca le di mucha importancia, hasta darme cuenta un poco más grande”, cuenta.
Si bien los inicios de Tania fueron en motocross, a los 17 años comenzó su paso por el Enduro, disciplina que, a diferencia de la primera, que se realiza en circuitos cerrados, se practica en espacios abiertos, en medio de la naturaleza, como sendas rurales y montañas. Luego de algunos años probando la disciplina, sin estar muy segura al principio, hoy cuenta que es el tipo de competencia que más disfruta: “Todo lo que hago, mi preparación, mi entrenamiento, está netamente pensado en la disciplina del enduro”, explica. “Lo que más me gusta es que voy compitiendo conmigo misma, voy desafiando la naturaleza, y en muchas circunstancias me desafío a mí misma, desafío mi mente, mi físico, tengo que saber reparar mi moto. Esos desafíos me llenan mucho”, añade González.
Hace un año, la deportista pudo hacer realidad uno de sus grandes sueños: fundar una escuela de motocross y enduro en Curicó. Si bien siempre tuvo claro que le gustaba enseñar y transmitir sus conocimientos a los demás, la decisión de abrir su propio espacio se vio frenada, explica, por las barreras de género que la disciplina, hasta hace unos años atrás, seguían perjudicando el desarrollo de las mujeres motociclistas. “Al principio no estaba segura de fundar mi escuela, y netamente por ser mujer, porque en Chile todos los entrenadores normalmente son hombres, y la mayoría de los pilotos son hombres, entonces siempre tuve un poco de miedo, por ese machismo que todavía queda”, señala.
No obstante, hace un poco más de un año Tania decidió dar el paso y hoy tiene a varios alumnos inscritos en su escuela, tanto hombres como mujeres. Es en este mismo espacio, explica, donde quiere ir derribando los prejuicios y estereotipos de género a los que se vio enfrentada desde pequeña como deportista, y que, con el paso de los años, según indica, afortunadamente han comenzado a dispersarse. “Siempre he sentido que tengo que ir rompiendo esas barreras. Me gusta esta idea de ir abriendo caminos, y yo sé que es un proceso difícil, estoy recién comenzando. Siento que aún me falta creerme un poco más el cuento, pero estoy trabajando por romper esa barrera y demostrar que las mujeres también podemos enseñar a andar en moto”, concluye González.
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