El plazo para que las universidades o centros de educación tengan su protocolo es septiembre de 2022. De no hacerlo, podrían perder su acreditación.
Si bien ya hay varias universidades y centros de educación profesional que cuentan con protocolos que sancionan estas prácticas, la ley contra el acoso en la educación superior es muy importante porque obliga a los establecimientos a elaborar un reglamento y a tener una política integral para la prevención, sanción y erradicación de este delito.
Y ya hay varias casas de estudios que tienen camino adelantado: la Universidad de Chile, la Universidad Católica, la Universidad Católica de Valparaíso, Universidad Católica de Temuco y la Universidad Austral, entre otras.
La Universidad de Chile fue pionera en abordar la violencia de género y el acoso sexual: desde el 2014 cuenta con una política de prevención del acoso sexual y violencia de género.
En los últimos años, la Universidad Católica de Valparaíso, entre otras entidades, ha trabajado profundamente en el tema: “Pusimos en marcha nuestra política hace 3 años y además de cumplir con lo que pide la ley, nuestro reglamento contempla hostigamiento y discriminación. Sabemos que otras universidades también lo han hecho y estamos muy contentas de que, gracias a esta ley, sean todas las universidades y centros de educación, quienes pongan en marcha una política que proteja a las víctimas de acoso, sean hombres a mujeres. Debemos ser un ejemplo para la sociedad”, dice Carmen Gloria Núñez, presidenta de la Comisión por la Unidad de Inclusión y Género y la Comisión para la Prevención y Acompañamiento en Conductas de Acoso, Hostigamiento, Violencia y Discriminación Arbitraria, CAHVDA, de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. Esta casa de estudios tiene desde septiembre una campaña que invita a construir la equidad, involucrando a toda la comunidad universitaria a participar en la erradicación de estas conductas, empezando por reconocerlas.
El 15 de septiembre pasado se publicó en el Diario Oficial la Ley N° 21.369, que regula el acoso sexual, la violencia y la discriminación de género en todos los establecimientos de educación superior, tanto universitarios como técnico-profesionales. Desde esa fecha corre exactamente un año de plazo para que las universidades que no cuentan con sus protocolos se pongan al día.
La ley es para todos los miembros de la educación superior: estudiantes, académicos, administrativos y otros funcionarios y contempla condena faltas verbal o físicas, presenciales o virtuales.
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