Temáticas de Género en el Liderazgo: Una Estrategia Rentable

POR: María Fernanda Poveda, Jr. Consultant WHO&Co.

Hablar de equidad e inclusión de género en las organizaciones no es solo una cuestión de justicia social, sino una estrategia clara y efectiva para mejorar la rentabilidad y competitividad. La diversidad en los equipos ejecutivos tiene un impacto directo en el desempeño financiero de las empresas. Según un estudio de McKinsey & Company, las empresas con mayor diversidad en sus equipos ejecutivos tienen un 33% más de
probabilidades de liderar en rentabilidad dentro de su industria.

Este estudio, que analizó datos de más de 1.000 compañías en 12 países, revela que las empresas en el cuartil superior de diversidad en equipos ejecutivos son 21% más propensas a rendir mejor en rentabilidad y 27% más propensas a tener una creación de valor superior.

A pesar de estos beneficios claros, alcanzar la igualdad laboral y la equidad de género sigue siendo un desafío monumental. Se estima que faltan 160 años para lograr la igualdad laboral y 300 años para alcanzar la equidad de género. Este retraso no solo limita el desarrollo del talento femenino, sino que también aumenta el riesgo de perder talento y disminuir la competitividad en la industria.

En un estudio realizado junto a Talana, donde se analizaron más de 200 empresas en Chile, se observó que la falta de equidad e igualdad no solo dificulta el desarrollo del talento femenino, sino que también afecta negativamente factores como la retención de talento y la competitividad. La inclusión del talento femenino es crítica para el liderazgo, la creatividad, el desarrollo de nuevos negocios y el equilibrio sostenible de las empresas.

Para abordar estos desafíos, es esencial que las empresas adopten un enfoque integral en sus iniciativas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI). Esto incluye el uso de plataformas, métricas y tecnologías que faciliten una ejecución innovadora y sostenible. Varias empresas ya han demostrado una clara intención de implementar estas iniciativas, enfocándose en dimensiones como la toma de decisiones, la estructura organizacional, el aprendizaje, el talento, la orientación externa, la plataforma tecnológica, el ecosistema y la innovación.

La diversidad de género en las empresas no solo es un imperativo moral, sino una estrategia empresarial que puede transformar el rendimiento, la productividad y la competitividad de las organizaciones. Las empresas que se comprometen a nivelar, potenciar y transformar sus políticas de DEI están en una posición única para liderar sus industrias y asegurarse un futuro sostenible y próspero.

Referencias:

• McKinsey & Company. (s.f.). La diversidad importa aún más: Los argumentos a favor del impacto holístico. Recuperado el 9 de julio de 2024, de https://www.mckinsey.com/featured-insights/destacados/la-diversidad-importa-aun-mas-los-argumentos-a-favor-del-impacto-holistico/es
• PwC. (2022). Women to Watch 2022. Recuperado de https://www.pwc.es/es/publicaciones/diversidad/women-to-watch-2022.pdf