Son aquellas nacidas entre 1978 y 1994 y se caracterizan por romper los estereotipos tradicionales. Nacidas en la era digital, consultan al doctor por Whatsapp, son más flexibles y más abiertas a los distintos esquemas de familia.
Las madres de familia han cambiado con el paso de los años, su estilo de vida no es el mismo de épocas pasadas y son cada vez más independientes y rupturistas respecto de sus propias madres. Se estima que el 22% de las madres del mundo son millennials, cerca de 9 millones de mujeres. Las nacidas entre 1978 y 1994 han cambiado los paradigmas de lo que significa ser madre y se describen sin ataduras o estereotipos, hiperconectadas y más coherentes con sus deseos.
Además, son conocidas por desarrollar varias labores a la vez; además de criar a sus hijos, trabajan, estudian y se preocupan por tener rutinas de vida saludable. Según el estudio Women’s Health de Amway y McCANN Truth Central, “seis de cada diez sienten culpa por trabajar mucho, pero al menos el 65% de las madres millennials afirma haber encontrado el equilibrio entre ser mujer y ser mamá”. Estas nuevas mamás han estudiado, viajado y tienen oportunidades que no tuvieron sus propias mamás. Ellas decidieron cuándo y cómo casarse, tener hijos, estudiar o seguir estudiando, viajar, etc.
Son a su vez más tecnológicas e hiperconectadas, Internet es su hábitat natural. Consultan dudas sobre los hijos en blogs y redes sociales, comparten experiencias con otras madres y agendan citas con el pediatra a través de sus teléfonos. De acuerdo a un estudio de Doctoralia, un 68% de las madres decide con más frecuencia buscar ayuda profesional por Internet.
En cuanto a los roles de género y esquemas de familia, son mucho más abiertas que la generación pasada. Algunas investigaciones sugieren que cerca de la mitad de las mamás millennials que tuvieron hijos en 2012 no estaban casadas o eligieron ser mamás solteras. Además, rompen con los roles típicos de género. Se declararon más abiertas a ver publicidades que muestren quiebres con los estereotipos tradicionales de género. El 64% de las mamás millennials entrevistadas afirmó que esas publicidades buscan generar un cambio positivo en futuras generaciones, mientras que en las mamás más grandes el porcentaje fue del 54%.
A su vez, un reciente estudio regional concluyó que las madres millennial quieren que sus hijos sean más sensibles y comprometidos con las tareas del hogar y que sus hijas ganen astucia, autonomía y fortaleza emocional.
Finalmente, esta maternidad denominada “flexible”, es más preocupada tanto del medio ambiente como también de su propio estilo de vida. Les gusta dedicar tiempo para trabajar en ellas, se preocupan más de la dieta y los ejercicios, además de ser más conscientes del ecosistema: El 89% de los consumidores de todo el mundo dice que los productos respetuosos con el medioambiente y los animales influyen en su comportamiento de compra. 82% de los millennials y el 73% de la generación Z dice que es importante vivir de manera ética y sostenible.
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