La periodista y empresaria chilena Carolina Concha, quien reside en México hace más de quince años, viajó a nuestro país para celebrar el lanzamiento de su primer libro: Y tú, ¿qué ves cuando me miras? Editado por Porrúa, esta obra tiene como autora a una madre que decide contarle a su hija la gran historia de amor de su vida.
“Voy a contarte una historia mágica, para que cuando busques el amor sepas que sí existe el que es perfecto para ti. La mayoría de las veces, ni siquiera hay que buscarlo. Llega, te sorprende y pone tu mundo de cabeza. Este es un relato que te hará soñar, volar, querer comerte el mundo a pedazos”, son las palabras iniciales de esta madre que revelará la historia que compartió con quien fue uno de sus grandes amores.
En Woman Times conversamos con Carolina Concha sobre esta primera novela, dedicada a sus tres hijos y hoy transformada en un éxito de ventas.
¿Cuál es la invitación central de esta novela?
Es un libro que te invita a soñar, a vivir la magia en todo sentido, no sólo del amor, sino de la magia de la vida, de atreverte a hacer cosas. No es un libro que habla de un amor perfecto, es un amor bastante real. Habla de un romance que te invita a saber que la vida es eso, luces, pero también sombras.
Una mamá decide escribirle un libro a su hija, a contarle cómo fue su historia de amor, pero detrás de eso hay un gran aprendizaje también de cómo ver la vida, de que no es fácil, no es un cuento de hadas ni venimos acá a ser las princesas y los hombres los príncipes que nos vienen a salvar.
La mayoría de la gente me ha comentado que este libro les devuelve las ganas de volver a intentar, de atreverse, de perder el miedo, que nunca es tarde para hacer cosas que te propusiste.
En términos personales, ¿qué te ha significado contar esta historia?
Es un libro que está escrito con el corazón abierto. Lo escribí en un momento de mi vida bastante complicado donde me estaba separando, y con esta sensación de cuando ves pasar la vida. Es como que el tren pasa al frente tuyo y no te subes, vives a través de tus hijos, del deber ser, de lo correcto, pero no te miras adentro, no hay una parte introspectiva para preguntarte si estás bien o mal.
Es muy personal este libro, fue un despertar. Eso sí, no es mi historia, pero hay muchas cosas que inconscientemente como escritora las reflejo. Creo que la idea que entrego es que hay que morir para volver a vivir. Este libro lo escribí en un momento en que sentí que toqué fondo en todos los sentidos, y ante los mandatos de esta “vida perfecta”, del “amor perfecto”. Fue una catarsis, por eso está escrito con mucha pasión y amor. Como en la dedicatoria coloco, esta obra me devolvió las ganas de vivir, de soñar, de volverme a enamorar, y creo que eso es lo que traspaso a través de la escritura, de querer comerme el mundo a pedazos de nuevo.
En nuestros tiempos, ¿cómo crees que debería abordarse el amor (en todas sus formas) dentro de la literatura y los medios culturales en general?
El amor no es el cuento de princesas que nos enseñan desde pequeñas, partiendo por eso. Aunque al principio el libro es bastante romántico y sigue siéndolo hasta el final, te muestra el mundo real, lo que es también el amor, lo que es el compromiso.
Hay una cosa que creo es súper importante en una pareja: que cada quien tenga su vida, que cada quien sea feliz a su manera, y en base a eso complementarse. Esto de la media naranja, por ejemplo, no existe, tú eres la naranja completa todo el rato, y hay que mirar así el amor. Entonces, eso es lo que te cautiva de la otra persona, que a ti te entregue el complemento perfecto, pero no que sea un amor de carencias.
El amor hoy en día es eso, es cada quien siendo completo por su lado, siendo feliz, logrando su propios sueños, pero teniendo un compañero o compañera al lado que decide estar contigo, no como una obligación o un deber ser.
Sé el primero en comentar