Si bien se trata de un conglomerado de 29 empresas, sólo tres de ellas tienen más de un 40% de mujeres en su directorio, lo cual representa un cambio insignificante respecto al año pasado.
Finalizada la temporada oficial de juntas de accionistas, 14 de las 29 mayores empresas de Chile que componen el IPSA (Índice de Precios Selectivo de Acciones) renovaron sus directorios. Sin embargo, según un estudio realizado por el Instituto de Directores de Chile, sólo tres de ellas aumentaron el número de mujeres en sus mesas. Se trata de Embotelladora Andina, Enel Chile y Engie Chile, que ahora son las únicas con más del 40% de representación femenina en su directorio.
Mientras que Engie Chile es la empresa más avanzada en este ámbito -con un directorio conformado por cuatro mujeres y tres hombres-, Banco Santander le sigue con una participación femenina del 44,4%. Por último está Enel Chile, que se posiciona en el tercer lugar con un 42,8% de representación. Aparte de estas, hay otras tres firmas que tienen un tercio de directoras: Ripley Corp, CMPC y Cencosud, mientras que el resto de las empresas del listado cuentan con menos del 30%.
Los resultados arrojados por el IdDC fueron desalentadores, y reflejan un aumento que no alcanzó a llegar ni al 1%. Así, la participación femenina en los directorios de estas 29 compañías representa un total de 21,8%.
En una entrevista con Radio Pauta, Fadua Gajardo, Directora Ejecutiva del Instituto de Directores de Chile, se refirió a estos resultados, expresando que “la responsabilidad de la elección del directorio es de los accionistas”.
Cuando se trata de puestos de presidencia, la representación femenina es aún más baja. De hecho, los hallazgos muestran que la única empresa IPSA que cuenta con una mujer en su más alto mando actualmente es SMU. Según expresó Gajardo, es necesario que haya un llamado desde los accionistas y controladores, que son quienes eligen a los directores.
Otro detalle relevante que reveló el estudio es que aún siguen existiendo las llamadas “empresas cero” que componen el IPSA, o sea, empresas que no cuentan con ninguna mujer en su directorio. Estas son Itaú, CorpBanca e Inversiones Aguas Metropolitanas.
“Aún nos falta trabajar y visibilizar”, expresó Gajardo. La diversidad de género en los directorios es esencial para promover un ambiente de equidad e inclusión. Además, es necesaria para impulsar la sostenibilidad de la compañía. Según una nota del mismo Instituto de Directores de Chile, se trata de una variable fundamental para la mejora en la toma de decisiones, la atracción y retención de talento, la responsabilidad social y la reputación empresarial.
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