Luego de recibir las postulaciones y comprobar que sí cumplían los requisitos para desempeñar el cargo, por unanimidad la sala del Senado respaldó el nombramiento de cinco nuevos integrantes del Consejo Nacional de Televisión (CNTV), el organismo que vela por el correcto funcionamiento de los servicios de TV. Entre los nombres propuestos, la mayoría por el gobierno entrante, se encuentran tres mujeres con diversas carreras y especialidades que buscan aportar desde sus áreas de conocimiento. Ellas son Daniela Catrileo, Bernardita del Solar y Beatrice Ávalos.
Catrileo, por una parte, marca un hito dentro del organismo al ser la primera mujer de origen mapuche en formar parte del consejo, algo que fue considerado como una carta innovadora. Es licenciada en educación y profesora de filosofía. En 2011 fue becaria de la Fundación Pablo Neruda en La Chascona y entre 2012 y 2016 obtuvo la Beca de Creación Literaria otorgada por el Consejo de la Cultura y las Artes. Además, su libro “Piñén” fue el ganador de los Premios Literarios 2020.
Respecto a su nominación, Catrileo dijo que “a pesar de que me tomó por sorpresa, creo que es fundamental que sujetos diversos podamos integrar múltiples espacios y que de esa forma aquellos espacios puedan tener una mayor heterogeneidad de reflexiones, de miradas, de percepciones”.
En tanto, Bernardita del Solar es la expresidenta de la Asociación Nacional de Mujeres Periodistas y también recala en el CNTV. Tiene estudios de posgrado en España, Inglaterra y Chile, ha sido editora de la revista Capital y en El Mercurio y fue directora de la revista Qué Pasa. Obtuvo un premio de periodismo y fue elegida entre las “100 mujeres líderes” de El Mercurio y Mujeres Empresarias en 2003 y 2004. Ocupó por años el cargo de directora del Centro de Estudios Públicos y su libro, “Piñera: una historia de un ascenso” obtuvo gran éxito, al mostrar, mediante entrevistas a familiares, amigos y colegas, una nueva faceta del expresidente.
Finalmente, Beatrice Ávalos es Premio Nacional de Educación en 2013 y completa el tridente de mujeres fuertes que ingresan al consejo. Estudió Pedagogía en Historia y después ganó una beca Fulbright que le permitió realizar estudios de doctorado en Estados Unidos, donde además obtuvo el grado de Ph.D. Partió su carrera como profesora de aula de Historia y Geografía en el colegio Mariano, después hizo clases en Gales y tuvo un paso como profesora de una universidad de Papúa Nueva Guinea, entre 1988 y 1994.
Algunas de sus contribuciones más destacadas en Chile son la creación del Programa Interdisciplinario de Investigaciones en Educación, PIIE, que llegaría a convertirse en uno de los centros esenciales de generación de conocimiento en Chile durante la dictadura militar; su aporte a las políticas de profesionalización docente durante la década de 1990, desde los Programas MECE-Media y Fortalecimiento de la Formación Inicial Docente; y la dirección del Núcleo Milenio sobre La Profesión Docente en Chile, en el centro de estudios CIAE de la Universidad de Chile.
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