Desde pequeñas Pymes lideradas por mujeres, hasta el gran comercio, cadenas de retail y la industria gastronómica, están desde el inicio de la pandemia apostando por este formato que minimiza los costos operacionales, los habitacionales , y que representa un sistema seguro para la distribución logística de productos. Los polos preferidos hoy son Las Condes, Providencia y Ñuñoa, pero se espera que se muevan hacia Santiago, Maipú y La Florida. Conoce aquí algunas recomendaciones a la hora de elegir este servicio.
En Chile hay 2.057.903 personas conmicroemprendimientos, de los cuales un 38,6% son mujeres, de acuerdo a las cifras del Instituto Nacional de Estadísticas. Por otro lado, el Ministerio de Economía, Fomento y Turismo, juntoal Ministerio de la Mujer y la empresa CADEM, estimó a finales de 2021 que el interés de las mujeres por emprender creció en un 18%, tal como señalan en sus investigaciones “Emprendimiento Femenino en Tiempos de Pandemia” y “Radiografía del emprendimiento femenino”.
Las cifras anteriores demuestran que la actividad emprendedora liderada por mujeres comienza a adquirir una fuerza que deberá vencer la interminable brecha de género que enfrentamos actualmente, pues como bien revela el estudio “El microemprendimiento femenino en Chile” el 68,3 % de las microempresarias gana menos que el salario mínimo y, por otra parte, mientras que los hombres se aseguran con utilidades mensuales de 800.000 mil pesos aproximadamente, las mujeres obtienen utilidades mes a mes de casi 450.000 mil pesos.
Las barreras son claras y los cambios, como siempre, urgentes. Sin embargo, ante la creciente necesidad y las ganas de las mujeres por emprender, el aumento del comercio electrónico desde que comenzó la pandemia les ofrece nuevas posibilidades. El informe “El emprendimiento en Chile: una mirada de género”, publicado en marzo de 2022 por la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), indica que, estadísticamente, las mujeres emprendedoras hacen un mayor uso de tecnología, y sólo un 33% del emprendimiento femenino es totalmente físico. Éstos datos, que señalan un claro vínculo entre las mujeres que emprenden y su interés por el uso de plataformas digitales, posibilitan para ellas diferentes alternativas para entrar al mundo de los negocios.
No obstante, cuando los emprendimientos ya se han levantado y se encuentran en funcionamiento, las preocupaciones no se reducen sólo a potenciar las ventas, sino que se suman tareas como encargarse del almacenamiento, de la preparación de los pedidos y la posterior entrega al cliente. Frente a estos desafíos que requiere el comercio electrónico, en Chile se está expandiendo el desarrollo de los llamados dark stores o dark centers, que a través de espacios físicos ubicados en zonas estratégicas de las ciudades, se encargan de la recepción, almacenaje y preparación de envíos de las empresas que toman el servicio.
“Son las pequeñas y medianas empresas las más interesadas en este tipo de servicios, ya que llegan a un punto donde las ventas que generan no permiten suplir por sí mismos la logística, donde arrendar una bodega, tener personal a cargo especializado y contar con sistemas de reparto”.
(Javiera Smith, Subgerente de Ecommerce de la empresa Dark Center de Agunsa eCommerce)
Éstos espacios logísticos, que ya son toda una tendencia en el mercado local, están disponibles tanto para grandes como microempresas, y dada las facilidades que posibilitan, se vuelven una gran herramienta para las mujeres que desde ya se encuentran emprendiendo, o que tienen ganas de hacerlo. Las dark stores (tiendas oscuras) ya han sido implementadas por grandes firmas como Falabella, Cencosud y supermercados como Jumbo, Walmart y Tottus, y son una alternativa factible para pequeños emprendedores. Incluso, habría un dark store por cada 200 mil habitantes o más dentro de la Región Metropolitana, según los estudios de Kawésqar Lab.
Javiera Smith, Subgerente de Ecommerce de la empresa Dark Center de Agunsa eCommerce, que ofrece estos serviciospara empresas a nivel nacional hace más de tres años, señala que éstas se encargan de manera exclusiva de acercar la mercadería al consumidor. De acuerdo a la experiencia que tienen dentro de Agunsa, “son las pequeñas y medianas empresas las más interesadas en este tipo de servicios, ya que llegan a un punto donde las ventas que generan no permiten suplir por sí mismos la logística, donde arrendar una bodega, tener personal a cargo especializado y contar con sistemas puede ser muy caro si se hace sólo, y puede tener muchos beneficios si se hace de forma colaborativa. Algunos rubros interesantes que hemos estado contactando son los de cosmética, licores, juguetería, tecnología, suplementos, ropa y accesorios outdoor”, señala.
Según la ejecutiva, la pandemia y el aumento de ventas por Internet ha permitido el avance de un Dark Center como el nuestro o ‘lugares oscuros’ en Chile. “Estos sin duda llegaron para quedarse. La tendencia creció con fuerza en el último tiempo en Estados Unidos y Europa, y permite tener espacio solamente para almacenar y preparar productos utilizados para el e-commerce, lo que post pandemia tomó fuerza en Chile. El gran comercio, cadenas de retail y la industria gastronómica, están por este formato que minimiza los costos operacionales, los habitacionales y que representa un sistema seguro para la distribución logística de productos. Los polos preferidos hoy son Las Condes, Providencia y Ñuñoa, pero se espera que se muevan hacia Santiago, Maipú y La Florida.”
“Las energías y fuerzas de una emprendedora deben estar puestas en hacer crecer su negocio desde las ventas. Ya no se trata sólo de la pelea de precios, sino sobre quién es capaz de entregar una mejor experiencia a un cliente final. Ofrecer distintas modalidades y formas de envío o retiro, permiten también que el cliente final sienta que es la empresa es la que se adapta a él y no el consumidor a la empresa”.
(Felipe Raurich, jefe comercial Dark Center, Agunsa)
Ante el boom de los dark centers, surge la siguiente pregunta: ¿Cuáles son las recomendaciones para mujeres emprendedoras que recién están comenzando y buscan este tipo de soluciones? De acuerdo a Felipe Raurich, jefe comercial de la misma empresa, es importante que cualquier tipo de emprendedor no tema en externalizar servicios y dejarse asesorar por empresas que se encargan del almacenamiento y la preparación de los pedidos. “Las energías y fuerzas de una emprendedora deben estar puestas en hacer crecer su negocio desde las ventas, el servicio y en entregar una diferenciación frente a su competencia. Ya no se trata de la pelea de precios, sino sobre quién es capaz de entregar una mejor experiencia a un cliente final: El mejor producto, el mejor packaging, el mejor contenido, construir comunidad, y como hoy en día es tendencia entregar el mejor servicio, ofrecer distintas modalidades y formas de envío o retiro, permiten también que el cliente final sienta que es la empresa es la que se adapta a él y no el consumidor a la empresa, como solía ser”.
La ingenieria comercial Fernanda Satta, Encargada de Alianzas de Endeavor Chile, sostiene que para las mujeres, comenzar a emprender se hace más complejo aún puesto que, muchas veces, enfrentan una doble jornada laboral, buscando equilibrar el trabajo formal con las tareas domésticas. Frente a esa carga, los dark centers se vuelven una herramienta que les permite seguir adelante con sus emprendimientos. “Cuando una mujer decide emprender, además debe gestionar las múltiples tareas que contempla cualquier emprendimiento, que van desde la compra de materia prima, diseño y confección del producto, generación de contenido de marketing, administración de las ventas, hasta el empaquetamiento y despacho. Los Dark Centers permiten aliviar la carga externalizando gran parte de la cadena de valor”, señala Satta.
En 2022, el 63% de los chilenos hace compras por internet, según el último Reporte de Industria de BlackSip, lo cual es un incentivo para las mujeres que comienzan a emprender, y que con las facilidades que entregan los dark centers, pueden avanzar pese a las brecha de género en el sector económico que aún no cerramos. Fernanda Satta concluye: “Mi recomendación es que las mujeres piensen en grande y se atrevan a adoptar soluciones innovadoras. Pequeños emprendimientos que nacen desde un espacio en la casa pueden brindar la misma experiencia al cliente que una gran marca, y no solo eso, también pueden acceder a herramientas de logística que les permita saber dónde se ubican sus clientes, qué productos se venden más, inclusive hasta calcular la tasa de rotación de sus productos.”
Sé el primero en comentar