La actriz es una de las muchas celebridades cuya imagen ha sido utilizada sin consentimiento con ánimos de desinformar en internet.
“Podrá sonar básico, pero la forma en que avancemos en la era de la información será la diferencia entre sobrevivir o convertirnos en una especie de distopía jodida”, alertaba un supuesto Barack Obama en un vídeo viral publicado por BuzzFeed en 2018.
Se trata quizás de uno de los “deepfakes” o vídeos falsos más virales de internet, creado por el popular director de cine Jordan Peele para demostrar lo fácil que es engañar a la gente con el uso de la tecnología.
Más de seis años han pasado desde aquel video y, a partir de entonces, la inteligencia artificial no ha hecho más que crecer. Así, desde imitar la voz de las personas hasta calcar sus movimientos y expresiones, el “deepfake” se ha llevado un sinfín de víctimas por detrás, demostrando lo peligroso de su mal uso.
Aquello fue lo que vivió recientemente la actriz estadounidense Scarlett Johansson, cuya imagen fue utilizada en un vídeo falso en el que se la ve junto a otras celebridades de origen judío, entre ellos Adam Sandler, Drake y Steven Spielberg, vistiendo una camiseta con una estrella de David, un dibujo de una mano levantando el dedo del medio, y el nombre “Kanye” en el centro —haciendo alusión a los recientes posteos antisemitas del cantante en X—.
Un llamado a la regularización
Tras su publicación, la actriz no tardó en responder. “Soy una mujer judía que no tolera el antisemitismo ni el discurso de odio de ningún tipo. Pero también creo firmemente que el potencial de discurso de odio multiplicado por la IA es una amenaza mucho mayor que cualquier persona que asuma la responsabilidad por ello”, aseguró en conversación con la revista People.
Al igual que muchas figuras públicas, esta no sería la primera vez que la actriz ha tenido problemas con la IA. De hecho, su imagen ha sido usada repetidas veces para generar vídeos pornográficos falsos en internet, algo que también ha afectado a celebridades como Taylor Swift y Rosalía.
“Muchos países progresistas, entre los que no se incluye Estados Unidos, han respondido de una manera responsable para poner límites a la IA”, aseguró. “Es aterrador que el Gobierno de los Estados Unidos esté paralizado cuando se trata de aprobar una legislación que proteja a todos sus ciudadanos contra los peligros inminentes de la IA“, agregó la actriz, incitando además a que los usuarios denuncien el mal uso de esta tecnología y reabriendo un debate que se vuelve cada vez más relevante dentro del mundo de la desinformación.