"La neurociencia ha demostrado que los sesgos de género no son únicamente el resultado de normas sociales o educación, sino que están profundamente arraigados en nuestros circuitos neuronales."
"La neurociencia ha demostrado que los sesgos de género no son únicamente el resultado de normas sociales o educación, sino que están profundamente arraigados en nuestros circuitos neuronales."