La maison Dior anunció oficialmente este lunes el nombramiento de Jonathan Anderson como nuevo director creativo de todas sus colecciones: femenina, masculina y de alta costura. Con esta decisión, la emblemática firma francesa inaugura una nueva etapa bajo una dirección unificada, algo que no ocurría desde los tiempos del propio Christian Dior.
El diseñador norirlandés, de 40 años, era una figura esperada en los pasillos de la moda parisina desde que en abril el presidente de LVMH, Bernard Arnault, confirmara su liderazgo en la línea masculina de Dior. Tras la reciente salida de Maria Grazia Chiuri —quien lideró la división femenina durante nueve años—, la maison confirma ahora que Anderson también se hará cargo del diseño de mujer y alta costura, marcando un hito inédito en la historia de la firma.
“Jonathan Anderson es uno de los mayores talentos creativos de su generación. Su incomparable sello artístico será crucial para escribir un nuevo capítulo en la casa”, declaró Arnault en el comunicado oficial.
“Jonathan Anderson es uno de los mayores talentos creativos de su generación. Su incomparable sello artístico será crucial para escribir un nuevo capítulo en la casa”.
Anderson, fundador de su propia firma JW Anderson en 2008, ha sido el artífice del renacimiento de Loewe desde que asumió su dirección creativa en 2013. Bajo su liderazgo, la casa española —también parte del grupo LVMH— pasó de un rol secundario a convertirse en sinónimo de vanguardia y artesanía contemporánea. Cambió el logo, rediseñó las tiendas, revitalizó los accesorios con modelos icónicos como el bolso Puzzle, y fundó el Loewe Craft Prize, consolidando así una identidad innovadora, coherente y profundamente personal.
La llegada de Anderson a Dior no solo implica un nuevo enfoque creativo, sino también un giro estratégico en el contexto actual del lujo. En medio de una desaceleración del sector tras años de crecimiento sostenido, LVMH busca reposicionar sus marcas apostando por la creatividad como motor principal. En ese sentido, la unificación bajo un solo diseñador podría aportar una coherencia conceptual inédita entre las líneas masculinas y femeninas, tradicionalmente tratadas de forma separada por motivos comerciales.
Este movimiento se suma a otros recientes cambios en el panorama de la moda de lujo: Pierpaolo Piccioli fue nombrado nuevo director creativo de Balenciaga, mientras que John Galliano dejó Maison Margiela, donde será reemplazado por Glenn Martens.
La tarea para Anderson en Dior no será menor. Además de enfrentarse por primera vez al exigente universo de la alta costura, deberá suceder a Chiuri, la primera mujer en liderar creativamente la firma y responsable de haber introducido un enfoque de género, funcional y comercialmente exitoso. Durante su gestión, Dior rozó una facturación anual de 10.000 millones de euros, con colecciones pensadas para ser vividas, no solo admiradas.
Ahora, bajo el liderazgo creativo de Anderson y la dirección ejecutiva de Delphine Arnault —hija del magnate Bernard Arnault—, la maison se prepara para un nuevo ciclo. Un ciclo donde se espera que la estética experimental y contemporánea de Anderson reinvente los códigos de Dior, sin perder de vista la sofisticación que cimentó su legado.